No te diré
nada.
No
por ahora.
No
para siempre.
Nunca
tal vez.
Quedarán escondidas,
ahogadas en el ruido
de otras más cómodas,
palabras sencillas
fáciles de pronunciar.
Quedarán sepultadas
ocultas,
presentidas y dulces,
flotando en la ley
seca de un silencio.
Siempre al borde
siempre a punto
de quebrar.
Quedarán amagadas,
ingrávidas,
envueltas en el tacto inocente,
leve,
de tu sal y tu boca,
breve,
instante vacío
y mío
de tu penúltimo adiós.
Poema de Jorge del Frago.
Fotografía de Ana Navarro.
1 comentario:
Vuelve el mejor Del Frago, sobre todo en la parte central.
Brindo por ello, en silencio.
Publicar un comentario